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MILAGRO !
LIBRETO DE OPERA EN 3 ACTOS
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DE
NICOLÁS GRANADA
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MONTEVIDEO
Imprenta á vapor de La. N.vción, calle 25 de Mayo 146 al 154
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•
I
Personajes
Doña Elvira.
Mónica (dueña).
Don Diego.
El Marqués de Quiróz.
Fortun.
El Arzobispo de Sevilla.
El Conde de Alvomonte (padre de Elvira).
Un clérigo.
Un sirviente.
I^os seises de la Catedral de Sevilla
Coro de sacerdotes, militares, estudiantes, damas, caba-
lleros y gentes del pueblo
época de felipe iv
ACCIÓN, EN SEVILLA, (1665)
POR DERECHA E IZQUIERDA, LA DEL ACTOR
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in 2013
http://archive.org/details/milagrolibretodeOOgran
Primer acto
Una gran plaza donde se celebra la verbena.
Puestos de flores, rosqueterías, tiendas de monta-
ñés, etc., ( cuanto pueda dar carácter á una fiesta
popular de esa clase, y en esa época), decoración rica
en colorido,
ESCENA I
Gentes del pueblo, soldados, sacerdotes, cortesanas,
petimetres, toreros, caballeros, estudiantes, alguaciles;
de vez en cuando una litara ó un cortejo de alguna
dama principal con hombres do armas, pajes, etc.
Gran bullicio al levantarse el telón — gritos de ven-
dedores, rasguidos de guitarras, carcajadas, campanas
á lo lejos, y acordes vagos de una r'aufarra militar.
CORO GENERAL
Gentes del pueblo —Para verbenas Sevilla,
La flor del suelo andaluz;
Donde la hermosura brilla,
D^nde el cielo es todo luz.
Repique el pandero
Y las castañuelas,
Que el aire está lleno
De gritos de fiesta.
Zapatea niña
_ 6 —
Con garbo y calor
Que tus pataditas
¡Ay!
Las siento toditas
En el corazón.
Soldados — Ya no nos conocen
Las chicas de Triana.
De vuelta de Flandes,
" Se cambian las caras.
Se cambian las caras.
Se olvidan los nombren,
Y se toca á muerto
En los corazones!
¿No te acuerdas
Niña mía
Cuando próximo
A partir
Me decías
Muy bajito,
Muy bajito:
¡ Queridito!
¡Que no te olvides de mí!
Y yo lleno
De entusiasmo,
Mas sintiéndome
Morir,
Te decía
Muy que dito ....
Muy quedito ....
¡ Alma mía !
¡Yo te llevo siempre aquí!
Muchachas— Já, já, já. . . .
¡Tiene mucha gracia,
Pero mucha gracia
Este militar!
Eso mismo se lo has dicho
A las rubias
Flamenquitas
De por allá.
- 7 -
Soldados— No, no, ¡ por Dios! . . .
Muchachas — ¡ No jures mas !
Soldados — No hay mas flamencas
Que las de acá.
Muchachas — ¡ Yaaá ! ¡ yaaá !
Soldados — ¡ Oie salero !
Muchachas - - ¡ Yaa á ! ¡ yaaá !
Soldados —Dame el brazo mi reina!
Y pelillos á la mar!
Viejos— Es el amor cual vino
De pajarete :
Cuanto mas envejece,
Se hace mas fuerte.
Pero la cepa,
De tanto dar racimos,
Al fin se spca.
Frailes — ¡íí^rm-dnosl No se olviden
Que á San Antonio,
Con mujeres hermosas
Tentó el demonio.
Y que el que á los placeres
Del mundo es dado,
De repente se encuentra
Endemoniado !
En medio de las dichas,
Por un momento,
Que in par vis re verter is,
Homo memento!
Todos — \ Sermón perdido!
¡ Pues si Dios las ha criado,
Por algo ha sido!
Mujeres— ¡Dicen muy bi^!
Muy requetebién !
Todos— ¡Tu lo quisiste
Fraile mostón !
Alguaciles — ¡Chitón!
¡Chitón!
¡Haya mas respeto
Con la religión!
— 8 -
Todos— ¡Chitón! ¡Chitón!
Que por todo anda husmeando
La Inquisición!
¡Chitón!
¡Chitón!
ESCENA II
Estudiantina, Elvira, Mónica. Un poco después ei
Marqués de Quiróz con dos nobles, sus amigos, y
Diego con Fortún.
{Entrada bulliciosa de la Estudiantina)
Todos— ¡Ahhlll ¡Ah!
Los estudiantes ya están acá.
¡Viva!
¡Viva!
Los soponcios á un lado,
¡Y viva la alegría!
Estudiantina — Aquí está la estudiantina;
La gloria de Salamanca!
La que alegra y enamora,
La que rie y la que canta.
Con las panderetas
Chin, chin.
Llevad el compás
Chán, chán;
Y el repiqueteo,
De las castañuelas,
Haced resonar. . .
Trinen las bandurrias,
Chin, chin;
Vibren las guitarras,
Chán, Chán,
Suaves y armoniosas.
El patrio cantar.
Aquí está la estudiantina,
— 9 -
La gloria de Salamanca,
La que trae más alegrías,
Que lantejuelas las charra*.
Con las panderetas'
Chin, chin, etc.
(Aparecen por la derecha doña Elvira y Momea tapadas
con mantos. Un poco después el Marqués de Quiróz)
Elvira á Mímica— (¿Lo viste?) (ap: : bajo)
Símica —(Sí, sí). (ap.)
(Pero no estoy cierta
Que venga por aquí.)
Elvira — ¡Es necesario que le hable!
Mi vida es intolerable
Un suplicio rudo, cruel. . .
Yo sé que me ama; yo le amo;
Pero le busco, le llamo.
Y va huyéndome el infiel!
Ménica — Son timideces
De ese doñee 1 .
Elvira — Va.il á torcer sus intentos,
Le arrancarán juramentos
Contra albedrío y razón.
Mas yo velo por sd suerte.
¡Pugnaré! ¡Me siento tuerte,
Y con fe en el corazón!
Ménica — Tenéis razón;
Tenéis razón;
Pero si el conde os pilla,
Vais á un convento,
Y á mí sobre una hoguera
Me vuelve chicharrón.
Estudiantes — Dios guarde á la buena moza,
Y a la dueña que la cuida;
A la primera despierta,
Y á la segunda dormida.
Con las panderetas
Chin, chin, etc.
— 10 —
Elvira — (Vamonos) .
Mónica — ¡Habrá atrevidos!
Por aquí . . .
Elvira — No, que allí viene,
El fantasmón! ....
(ap.)
ESCENA III
(El Morques con dos caballeros. Luego Diego con Fortún
por el fondo á la derecha. Embozados)
Mónica-
El Marqués-
-El marqués
Vendrá á cantarte su idilio.
Diego
Mónica-
Elvira-
Fortún-
Estudiantes-
¡La rubia, señores!
¡Qué encuentro
Divino!
¡La rubia
Hechicera
Por quien
Yo deliro!
(¡Elvira!
Dios santo!
Elvira
Y mi tío!)
(Prudencia).
(¿Por dónde
Me escapo?)
-(Este sitio
Dejar os conviene)
¡Qué viva la niña
Mas blanca que el lirio
Que clá vida ó muerte
Con sus ojos lindos!
Mientras á la dueña
Le hacemos la cruz,
Cantemos: ¡qué viva!
¡Vivaaá!
El garbo andaluz!
(á los caba-
lleros)
(al paño)
á Elvira, bajo)
(á D. Diego)
— 11
Marqués-
Estudiantes -
Elvira
M ón ka-
Elvira -
Marqués
Ménica
Marqués
-Tomad, tomad . . .
¡Viva el marqués!
¡El galán de mas rumbo
Y esplendidez!
Yo estoy temblando. . .)
((dándole á les estu-
diantes un bohillo)
Mónica
-(Allí esti él...)
(Huyamos).
Escuchadme
No puede ser.
Señora. . .
¡Ah señora!
Tened compasión,
De quien os adora
Con loca pasión.
Baiad vuestro manto;
¡Hablar! me por Dios!
Aunque morir deba
Al oír vuestra voz!
-Es' muda, y es sorda,
Y ha tiempo cegó.
(por Diego)
(galantemente á
Elvira)
(¡Qué esto suíra yo!)
Todos - Já, já, tiene gracia
Diego
Elvira
Mónica
Eoriíin
Mónica
Elvira ■
Marqués-
Mónica
Diego -
Marqués
Diego -
Coro-
Diego ■
(¡Dios mió! ¡Dios mió!)
Dejad por tavor. . .
(Prudencia, prudencia;
¡Os perdéis, señor!)
-Pediré socorro
Mónica, no, no , . .
Llevad á la vieja!
A mí!. . .
Vive Dios!
Atrás todo el mundo
Que la amparo yo!
¡Diego!
¡Atrás y paso!
¡Atrás!
¡Ya se armó!
¡Venid señora!
(No me conoces)
(interp.)
(queriendo
abrirse paso)
(á D. Diego)
(á los el tul os)
(inter p.)
(embozándose)
(á Elvira)
{bajo)
— 12 —
Tomad mi brazo
Podéis confiar;
Un caballero
Noble y sincero,
Como escudero
Os va á guiar.
Patria de nobles
Es nuestra patria,
Donde á las damas
Se sabe honrar.
Si el que os ofende
No es n n pechero,
Mi leal acero
Sabrá bascar.
Elvira— (¡Ah! Diego, Diego! (ap.)
¡Te amo, te adoro
¡Así por siempre
Te quiero amar!)
Marqués— (¿Cómo me muestro (ap.)
Y me descubro
En este lance
Tan singular?
Si mi sobrino
Me reconoce,
Todos mis planes
Van á fallar.)
Fortún — (Ni combina do { a P-)
Que fuer 4 e 1 lance,
Mas oportuno
Fuera el nzar.
EL descubierto;
Diego indignado,
Todos sus planes
Hace saltar.)
Ménica — (¡Dios uno y trino! ( a P-)
¡Jesús bendit«>!
¡De buenas uñas
Legro escapar!
Si esto se arregla
— 13 —
Y no hay mandobles,
Dos velas gordas
Pongo en tu altar.)
Elvira — (Te reconozco, (ap.)
Noble y altivo
Cuando tu enojo
Veo estallar.
Fiero, arrogante.
Esa es tu sangre:
Esa es tu herencia
Y no el altar!)
Coro- (Apabullado, (ap.)
Desconcertado,
Y mal parado
Quedó el galán.
Ahora se escurre,
Y se recata,
Y deja el can po
Sin batallar,
Ja. já ja!)
Diego — ¡Pa^d!
El vira— (jG-raeias; Diego!) ( f *p)
(á Elvira)
Todo*
Ja, |á, ja!
Se lució,
Se lució,
El galán
Mónita
-Vamos pronta niña.
Pronto por acá.
Pretiles -
-¡Memento homo
Qitia par vi* est!, .
Ditgo
¡Dios poderoso!
¡Dios de Israel!
E-ta voz me recuerda
Que á mis votos sagrados
Voy siendo infiel
Soldados — ¡Viva la gloria!
¡Viva el amor!
Diego — ¿Cuál es, ¡Dios mío!
Tu religión?
- 14
Elvira
Diego
Marqués
Diego y Elvira-
Estudiantina-
— ¡Amor!
— ¡Amor!
— (Tener que huir
Como un ladrón. . .
Todo, todo,
Todo se perdió!)
— Sí. ¡Amor!. . .
-Amor los ángeles cantan.
Amor los pájaros trinan,
Y también amor suspiran
Las
¡Que viva la niña!
Chin chin,
¡Que viva el galán!
Chan, chan,
¡A la dicha de ambos
Yaya este cantar!
Tomad y basta.
¡Yiva!
¡Tomad!
¡Tened paciencia!
cnerdas de mi guitarra.
Diego
Estudiantina
Diego
Todos -
Marqués — (¡Cielo! ¡Esto mas!)
. (bis)
(dándoles dinero)
(¡Mañana al cl¡iustro. r
Diego — ¡Paso!
Marqués — ¡Pasad!
Elvira — ¡El amor triunfa!
Todos— i Yiva!
(al Marqués)
(rabioso)
(amenazando
á Diego)
Marqués— ¡Temblad!
/(amenazante, mientras se
\alejan Elvira, Diego y
'Ménica. El coro rie. Se
(repite la estudiantina, bal
le. etc.
(Telón).
- 15 -
Segundo acío
Sala lujosa en casa de D. Diego. Al fondo ancha
portada con ricas tapicerías que comunica con el gran
salón. A la izquierda, primera caja, balcón con cor-
tinas; segunda puerta, habitación del Marqués. A la
derecha, puerta amplia y decorada, que se supone dá
al vestíbulo del palacio.
ESCENA I
Fortún y Coro de triadas y lacayos, trayendo presentes
para el profeso.
■
Coro —Para el profeso
Traemos presentes:
Vasos sagrados
Para el altar;
Flores, perfumes.
Albas, roquetes,
Sencillos votos
De la piedad.
Fortún — Poned aquí,
Poned allá,
Y á los donantes
Las gracias dad.
Coro — Esta alba hermosa,
Está tejida
Con tenues fibras
Como un vapor;
Fibras de amianto,
Que el fuego limpia,
Como al pecado
La religión.
Cuando él la vista,
Las campanas sonarán:
¡Talán! ¡talán! ¡talán!
— 16 —
Y la oración y el incienso
Por el templo se alzarán.
Talán! talán! talán!
Fortún— I* o\ied aquí,
Poned allá,
Y á los clonantes
Las gracias dad.
Coro — Este cáliz
Cincelado,
Gon mil piedras
Adornado,
Es un clon
Rico y preciado
Que veremos
Consagrado
Por sus manos
De jazmín.
_.. . (hacen los movimien-
Tllin! ¡tilín! ¡tilín! \tos que «e wan en él
momento de alzar).
¡Mea culpa! ¿mea culpa! ¡mea culpa!
Se arrodilla así:
¡Tilin! ¡tilín! ¡tilín!
Se inclina sobre el cáliz
Y murmura así:
¡Mea culpa! ¡mea culpa! ¡mea culpa!
Tilin! ¡tilin! ¡tilin!
Se eleva por ñn
Sobre su cabeza,
Y resplandeciente,
Dorado,
Fulgente;
Encerrando la preciosa sangre
Del Omnipotente;
Como luz que naciera en Oriente,
Brillante,
Luciente,
Del cristiano refleja en la frente,
Que, prosternado,
Arrodillado,
— 17 —
Murmura así:
¡Mea culpa! ¡mea culpa! ¡mea culpa!
Mientras gime el órgano,
Y las campanillas
Con su retintín
Hacen :
¡Tilin! ¡tilín! ¡tiliu!
Fortún — Poned aquí,
Poned allá,
Y á los donantes
Las gracias dad.
Coro de mujeres — Estas flores tan bellas,
Tan olorosas:
Azucenas, jazmines,
Nardos y rosas,
A sus pies deshojadas
En el instante
En que cante ¡Aleluya!
Y ¡HosKina! cante,
En sus pétalos llevan
En dulces giros
Súplicas, elaciones,
Y hasta suspiros.
Fortún- Poned aquí,
Poned allá,
Y á. los clonantes
Las gracias dad.
. Coro general — Adiós, Fortún
Con Dios quedad;
Y al padre que hoy
Va á consagrar,
Pedid bendiga
Nuestra humildad.
Fortún — Id, id, tranquilos
Que así se hará.
¡Adiós, adiós!
Coro — Con él quedad.
Fortún— ¡Andad con Dios!
(Que él solo sabe (ap.)
-18 —
En lo que irá á parar
La profesión). (váse el coro)
ESCENA II
Fortún solo: luego el Marqués
Forívn — Elvira lo ama,
Juntos se lian criado,
El la quiere también,
Mas dominado
Por la superstición,
Teme y vacila
El yago sacudir.
El Marqués de Quiróz,
Su noble tío:
Un viejo libertino y disipado,
Que de Elvira se dice enamorado.
Para heredarlo, en vida
Lo quiere hacer morir . . .
¡Morir!
¡Morir!
Cuando riqueza,
Juventud, honores,
Y sobre todo ¡Amor!
¡Nos convida á vivir!
¡Ah! ¡no será!
Elvira se interpone,
Yo la secundaré,
Dios nos ayudará,
Y contra el fanatismo,
Y contra el egoismo,
Y las traidoras artes del abismo,
Elvira triunfará!
Por ella estoy aquí;
Su dulce ruego
No pude desoír.
Por ella estoy aquí, y á su don Diego
He venido á servir;
- 19 -
¡He venido á salvar!
Y en vez del claustro
Tétrico y austero,
La vida,
El albedrío,
Cuanto el amor nos brinda placen-
tero,
Con la ayuda de Dios le hemos de
[dar!
Alguien llega... ¡El Marqués!
¡Cielo! es preciso
Que de esto mande á Elvira pronto
Voy. ■ . [aviso!
Marqués — ¡Esperad! (saliendo por el fondo
lfortún— Señor. .'. y deteniéndole)
Marqués - ¿Diego? (preguntando)
Fortún—'Eu. el templo.
Marqués— Así me gusta. ¡Qué piadoso ejemplo!
¡Esto honra nuestra estirpe soberana!
¡Endosar un Quiróz la humilde lana!
¡Un Quiróz!
¡Un Quiróz!
No hay en la tierra noble á la par
Y arriba, ¡sólo Dios! [nuestra
(Cantable)
Yo fui doncel del gran Emperador,
Y mi aspecto gentil y galán,
Para las damas era no imán,
Para los hombres celos y rencor.
Ellas, me idolatraban con afán;
Ellos, me aborrecían con furor;
Y mi ternura,
Y mi valor,
Y un ¡Amor mío!
O un ¡Yoto á San!
De mi hacían D. César ó D. Juan:
De ellos terror,
De ellas imán.
Fortún — (Me parece un pedante charlatán
— 20 —
Mi nuevo amo y señor
¡Imán! (imitándolo)
¡Terror!)
Marqués— ¿Y qué se dice
De mi llegada?
Fortún — Todos repiten
Que es ¡gran honor!
Marqués— ¿Y ellas?
Fortún — Entre ellas,
Una algarada
Por conoceros
Se arma, señor.
¡Las pobrecillas! . . . (con gazmoñería)
(Hay que adularlo)
Marqué* — Por todas partes
Siempre fué así.
Yo siempre haciendo
Por evitarlo,
Y ellas corriendo
Detrás de mí.
Si^ ir mas lejos,
Anoche mismo
En la verbena. . .
Fortún — (¿Qué irá á decir?)
Maaqués — Le dio á una rubia
Un paroxismo
Tan solo al verme
Fortún — (¡Vaya un mentir!)
Marqués — Yo soy así
Fortún — (Já. . . já. . .) (ap.)-
Marqués — Yo soy así
Fortún— (Já. . . já. . .) (ap.)
Marqués — Yo no las busco
Vienen á mí.
Sirviente — Señor, una tapada (al paño)
Pretende hablar con vos.
Marqués— ¿No te lo dije? (á Fortún)
¡Alguna enamorada!
¡Y con esta van dos!
— 21 —
Haced entrar (al sirviente)
A esa beldad (entra Ménica)
Señora. ¡Santos cielos!
(¡Qué atrocidad!)
Fortún — (¡Mónica! ¿Qué será esto?)
Márqiiés — Hablad, hablad...
Mónica — ¿Sois vos el señor Marqués
Qué de Madrid ha llegado,
De quien habla todo el mundo?
Marqués— ¡Soy yo! (con fatuidad)
¡Soy yo!
Mónica — Mi saludo mas profundo,
Mas profundo,
Y este ramo delicado,
Y un pedido
Para vos.
Marqué.] — ¿Quién os manda?
Mónica — M i señora .
Marqués— Es muy lato.
Mónica — Así conviene.
Fortún— (¡Si aquí un santo (ap.)
Ño interviene
Nos lucimos
Como hay Dios!)
Marqués— (Toma nota) (á i ortún con malicia)
¿Y tu señora. . . (alto á Mónica)
Mónica— ¡Es condesa!
Fortún — (¡Qué descaro!) (ap.)
Marques — ¿Y es. . . muy joven?
Mónica — ¡Pues es claro!
Marqués — ¿Y bonita?
Mónica— \Qomo un sol!
Marqués— Mira, mira
Lo que dices,
Precursora
Del Diluvio,
Porque al sol
Lo pintan rubio. . .
Mónica — Y ella es rubia.
22
Marqués — ¡Santo Dios!
¡Rubia!
Mónita — ¡Rubia!
Marqués — ¡Rubia!
Fortún — (Pero esa rubia (ap.)
No es para vos!)
Ménica — ¿Vistes en la iglesia
A la Inmaculada,
De ángeles
Y flores
Y cirios
.Rodeada?
Pues no vistes nada
Nada,
Nada,
Porque mi señora,
Mas rubia,
Msls bella,
Con su cabellera
Que rayos destella,
Y pisando flores
Que alfombran su huella,
No le envidia nada
A la Inmaculada.
¡Nada!
¡Nada!
Margues — ¿No le envidia nada
A la Inmaculada?
Mónica— ¡Nada!
¡Nada!
Fortún — No le envidia nada
A la Inmaculada
Nada
Nada
Marqués — ¡Portentoso retrato
Que sólo á una beldad
Convenir puede;
Y esa es la rubia,
La doncella altiva,
— 23 —
Por quien mi corazón
De amor se muere,
Y esa debe de ser; ¡tu eres la dueña!
¡Tonto de mí! Sí; ¡tu eres!
Tu eres la de anoche,
La ele Ja verbena,
La que acompañabas
A aquella sirena,
Y que te oponías
A mi dulce plan,
Muy dada de mano
Con otro galán.
Mónica-
—¿Qué eso era finjido
Señor no adivinas?
Marqués
-¡Ah! Son las mujeres
¡Divinas, divinas!
¿Con qué era finjido?
Mánica-
—¡Es claro!
Fontan-
-¡Cabal!
.
Marqués-
— ¡Ah dueña del alma!
¡Vales un caudal!
¿Y dónde está?
¿Qué es lo que quiere?
¿Por qué no viene?
Zontan-
-Calma, señor. . .
Mónica-
-Ella está abajo
En su litera. . .
Marqués-
-¡Y no lo has dicho!
■
Fonian-
-(¡Vaya un valor!) (ap.)
Marqaés-
-Di le que suba . . .
Mejor, yo mismo. . .
Deja que vaya. . .
(Vestido así ... ) £ (""O! encontrando
v _ ' {sencillo su vestido)
Vierte esas flores, (á Fortún)
Para que pise. . .
Voy á buscarla
Elvira-
-Ya estoy aquí. (á la puerta
— 24 —
ESCENA ITT
Dichos y Elvira
Marqués - ¡Ah! Fortún. . . Sosténme. . .
¡Es ella! ¡Qué dicha!
¿Por qué tan honrada
Mi pobre mansión?
Elvira — Señor, vuestra fama
Que hoy llena Sevilla,
Aquí me conduce.
Marqués — ¿Es esto ilusión?
Elvira— Piadoso cual noble
Os pinta la gente . . .
Mapqués— Señora, señora. . .
Elvira— ¡De gran corazón!
Capaz de imposibles
Vencer fácilmente,
Con tal de á una dama
Rendirle un favor.
Marqués — Ardo en deseos
De adivinaros,
De complaceros,
De demostraros
Como mi anhelo
Vuela tras vos.
¡Ah! ¡sed piadosa!
¡Hablad señora!
¡Oiga ese acento
Qre me enamora!
¡Espero una orden
De vuestra voz!
Elvira — Pues bien . . . (vacilo)
Marqués — ¡Dejadnos solos! [a Món. y Fort.)
Elvira— ¿Qué hacéis?
Marqués— Testigos no ha menester,
Reina que manda,
Siervo que implora,
25
Y solo espera
Obedecer.
íontan — ¿Qué se propone?
Mónica— ¿Qué quiere hacer?
t 7 Estaré alerta
Los dos - U1 , ,
Allí estare.
Marqués — ¡Audad á prisa!
Dos— Allí estaré. (yánsé)
ESCENA IV
El Marqués y Elvira
Marqués — Hablad, señora
Elvira — Voy . . .
Marqués — ¡Qué placer!
Elvira — Una dama,
Que de fama,
Os conoce
Marqués.
Afligida,
Dolorida,
Os implora
Esta vez.
Le han dicho que del mundo los
[engaños
Huyendo, ensangrentado el corazón,
Vais del claustro, sombrío y solitario,
El reposo buscando con ardor.
Le han dicho, que riqueza y
[poderío,
Arrojabais humilde en su dintel,
No queriendo guardar ni. los suspiros,
Que tal vez os enviara una mujer.
Marqués— ¿ Yo. . . 3^0 ? (¿qué hacer?. . .
Pues si esta profesión me poetiza,
Y puedo ante ella hacer el sacrificio
De rendir á su amor hasta mi fé . . .
— 26 *~
Elvira— ( Mordió el anzuelo, es mío, lo
[domino
(Por donde sale es lo que quiero ver)
Morques — ¿Quién puede ¡olí señora!
Dolerse de mi?
Elvira — Un pecho sensible,
Un alma gentil,
Marqués — ¿Y decis que es bella?
Elvira— Se parece á mí.
Marqués- ¡A vos!
Elvira— A mí.
Marqués — ¡AL! Si eso fuera.
Si yo viera,
Que es verdad
Lo que decís,
No mis votos,
Hasta el alma
Toda entera
Diera aquí!
Elvira —Verdadera
Y sincera,
En palabras
Siempre fui.
En mi labio:
Solo impera
La verdad
Des que nací.
Marqués — Y decís que ella me ama?
Elvira—Sí, ¡con delirio!
Marqués— Decid ¿cómo se Uam&?
Elvira— 'No.
Marqués — ¡Qué martirio!
Elvira — Ella padece
Marqués — ¿Por mí?
Elvira — Si
Marqués — Que es un sueño
¡Ay! me parece!
Elvira— ¿Coa que cambiáis por ella
Vuestro destino?
27
Magues— (¿Como Le digo ahora (ap.)
Que es mi sobrino?)
Elvira— ¿Vaciláis?
Marqués — ¡Pienso ,
Que el mundo dentro el alma
Lo veo inmenso!
Por que sois vos,
Si, lo adivino,
La que esta dicha,
En mi camino,
Viene á brindar (le torna la mano)
Elvira— Dejad, dejad. . .
Marqués— No, no sirena
De dulces cantos,
Dejad que adore
Vuestros encantos,
Y de esos labios
Divinos, santos,
Oiga el acento
De la piedad!
Elvira -¡Deiad! ¡Dejad! \(Se oyen dentro los cán-
* o i j ^ ticos religiosos).
¡Oid oid!
Marqués — ¡Oh! ¡Maldición!
Elvira- -Fúnebres salmos. . .
¡Vienen por vos!
Coro — ¡Hossana qiti viene in mómine Deas!
Fortún — Ya llegan los canónigos [dentro)
En procesión. (entrando aeompa-
L nudo de Montea)
Marqués (¡Todo perdido!)
Elvira - ¡Vienen por vos!
Marqués— Ño, no.
(¡Oh! Maldición!) (coro de canóni*
Elvira — (¡Diego!) gos con Diego)
Diego — (¡Elvira!)
(¿Qué es esto Dios mío?)
Mirrias— (Esperad.) (á Elvira)
Por aquí, por aquí (a ¡os canónigos)
El momento en verdad es supremo.)
— 28 —
(Esperadme...) (á Elvira)
Señores, ¡venid! (á los canónigos)
((vanse todos
Coro—¡Hossana qui viene etc.! uTquLSk-
[go y Elvira)
ESCENA V
Elv i r a y Diego
Diego— ¿Qué es esto? ¿Por qué vienes á
¡A sublevar mis iras! [tentarme?
A conmover mi pecho con el odio
Contra ese ser á quien amor inspiras?
Elvira-
Diego
Diego! ¡Diego! habíame así.
¡Así te reconozco!
Ah! vuelve en tí!
■¡No! ¡No! ¡Qué horror!
Déjame para siempre
¡Piedad Señor!
Elv ira— ¡Mírame Diego!
¡Soy yo, tu Elvira!
¡Por tí he venido!
¡Ah! ¡mira, mira!
¡Mira estas lágrimas!
Este dolor!
¡Soy yo, tu Elvira!
Soy yo, tu amor!
Diego— Nol no! ¡Dios mío!
¡Piedad Señor!
Elvira— Tu madre santa,
Tu santa madre,
Jamás te impuso
Este dolor.
" Huye, te dijo,,
" El mundo pérfido
" Si en él no encuentras
" Un casto amor. "
Diego -\0\\\ Calla Elvira!
¡Piedad Señcr!
29
Elvira — Yo, que de niña,
Siempre he vivido
De tus miradas
Al resplandor,
Si entras al claustro,
Eria, aterida,
Moriré mustia
Como una flor.
Diego- -No, no ¡Dios mío!
¡Piedad Señor!
¡Piedad!
¡Piedad!
¡Ah! Elvira ¿porqué me despedazas
El pobre corazón? Sumisa el alma
Deshojaba las flores del recuerdo
Del templo sacrosanto sobre el ara.
Envuelto en el sayal de mis tristezas,
Ofrecía al Señor mí fé, mis lágrimas.,.
Pero has venido tú y siento, siento...
Elvira-
Diego-
Elvira -
Diego
Elvira
Diego
Los dos
-¡Ah! dilo de una vez : sientes que
[me amas!
Que no podrás sacarme de tu pecho,
Y que del mismo altar ante las gradas,
Cuando quieras cantar "Ave María",
Al murmurar la mística plegaria,
Te acordarás de mí, de aquellas noches
Cuando nuestras cabezas reclinadas
Sobre alas de armonía, hacia los cielos
Temblorosas subian nuestras almas.
¡Ave María!
¡Oratia plena!
Así decías tú . . .
-Y tu me acompañabas blandamente,
Sí, blandamente.
Y arpegio y voz, volaba dulcemente,
Sí, dulcemente,
A perderse en lo azul!
Ave Maña, etc.
— 30 —
ESCENA VI
Dichos, Fortún y Mónica
Fortún — ¡Vienen! j (sale , n Fortún y Moni-
' i ca deapavoi'ido-v
Diego - ¡Dios Santo!
Elvira— \Ay ele mí!
Ven por aquí.
Diego — No, ¡no puedo!
¡Déjame seguir mi suerte!
Afónica— -¡Que se acercan!
Diego — ¡Qué tormento!
Elvira — ¡Ven!
Diego — ¡No puedo!
Elvira — (¡Dios piadoso!)
Prométeme. . .
Diego — -N o prometo
Elvira — ¡Te quieren matar!
Diego — No importa.
Elvira — ¿Y yo?
Diego - ¡Tú!
Elvira— Sí yo.
Diego — ¡El Infierno
Lucha contra mí!
Elvira — No, tu ángel;
¡Tu ángel guardián!
¡Tu ángel bueno!
Fortún — Vamos pronto. . .
Mónica — Decidid . . .
Fortún — Señor ceded. . .
Diego— ¡Si no puedo!
Elvira — Ven, Diego. ¡Por Dios!
Diego— No, toma. Toma, toma este recuerdo
T . [(sacándose del
Un retrato de mi madre. Xcudio un re-
[ licario)
Ella me lo puso al cuello.
Elvira— ¡Iluminadle señora! (lo besa)
31
Fortún —
Afónica—
Coro-
Marqués -
Elvira—
Mar qués-
Car o—-
Diego —
Marqués-
Elvira -
Ménica
Fortún-
Coro -
Marqués -
¡El Marqués!
-¡Los reverendos!
Hossana qui viene in
(Todo se arregió señora
Venid conmigo)
(Sí, luego)
Venid, venid. . ,
(¡Esperad!)
Hossana! Dómine
(¡Dios mío como la
(¡Señor ahorradme
Este tormento!)
-(Quedo con ella,
Y él al convento)
(¡Se va con ellos!
íSe va y lo pierdo!)
I (entran el Marqués
f y los canónigos)
nomine Deo.
(ap. á Elvira)
(á Diego)
(á Elvira ap.)
Deo!
dejo!)
(¡Dios
nos
ayude
Elvira-
Mar qués-
Diego-
Elvira-
Fortún y Montea-
Coro
En este enredo!)
-(¡De la batalla
Es el momento!
-¡Hossana! ¡Hossana!
Dómine Deo!
—Vamos andando. . .
Pasad primero
(Vos esperadme
Señora os ruego)
-Sí, sí. . .
—(Esperadme)
-(¡Elvira!)
-(¡Diego!)
¡Todo perdido!
—Por aquí. ¡Presto!
- / Hossana ! ¡ Hoss ma!
¡Dómine Déos!
(á Diegoj
(á Eivira)
(ap.)
(ap.)
(vánse)
( (empujándola, hacia
( una puevta screta)
(dentro)
(Telón)
32
Tercer ncío
Sacristía de la Catedral de Sevilla. Telón corto
para mutación.
Elvira vestida de ínfantillo con el traje de los seises
de la catedral. Fortún disfrazado con el traje de
sacristán: sotana y bínete punzó, y roquete con enca-
jes. En las manos un varal de plata.
ESCENA I
El ('oro de seises rodea á Elvira agasajándola
Coro — Llegas en un gran día
A nuestro coro,
Cuando el templo relace
Cual ascua de oro,
Y á los pies del Eterno
Que está en la altura,
Va á pronunciar sus votos
Una alma pura.
Hasta su excelso trono
Hoy se levanta,
De nuestra voz los ecos
Que gloria canta,
¡Canta!
¡Canta!
Elvira-— (Sí cantaré 1 1 </>■)
Pues siento dentro el pecho
Que triunfaré.)
Coro— La procesión grandiosa,
Pronto en la nave,
Desplegará su pompa
Solemne y grave.
Bajo el palio sagrado,
33
Ya la hostia santa,
Y nuestra voz sus glorias
Humilde canta.
¡Careta!
¡Canta!
Elvira— (Sí cantaré (ap.)
Pues Dios me dará ayuda
Y venceré.)
Coro— Ya lanzan las campanas
Su ultimo acento;
Ya el órgano suspira
Profundo aliento;
Ya el incienso sus nubes
Tenues levanta;
Ya del coro las voces
Los salmos canta.
¡Canta!
¡Canta!
Elvira — (Sí cantaré {ap.)
Pues del abismo á Diego
Lo salvare.
Coro Vamos.
Ven.
Debemos ir. . .
Tocio está preparado
Elvira ¡Ay! ¡Me siento morir!
Coro ¿Qué tienes?
Elvira Nada
Ya pasará
Dejadme un solo instante
Coro (¡Qué pálido está!)
¡Qué tendrá!
¡Qué tendrá. . .)
¡Vamos!
Te esperamos,
Te esperamos allá. (vánse)
— 34 —
ESCENA II
Elvira sola, luego Fortún
.Elvira— ¡Ay! ¡Me siento morir!
¡Tremendo instante!
¡Grande era mi valor!
Pero llega el momento
Y vacilante,
Me siento con horror!
Por acercarme á él,
En este traje
Mis vestidos cambié.
Exponiéndome voy á todo ultraje,
Mas por el ¿qué no haré?
Dios soberano y eterno,
Que desde el cielo profundo,
Penetras aquí en lo interno
De mi pobre corazón;
Por un amor casto y puro,
Que ha nacido con mi alma,
Lucho afanosa, sin calma,
Sin mas amparo que vos/
Tu me inspiras ¡Oh Dios mió!
Si tu santo nombre invoco,
Siento renacer mi brío,
Siento el eco de tu voz!
Que me dice : " ¡Lucha Elvira,
" Contra el amor no hay abismo,
" Y hasta del sepulcro mismo,
" Puede triunfar el amor! "
¡Ah Señor!
¡Ah Señor!
Dadme la muerte,
O devolved me
Mi único amor. ¡(mtmF*mn
i izquierda)
Fortúh — Niña en el coro
Te esperan ya.
35
Elvira ¡Jesús! (asustada)
Fortún ¿Qué tal? ¿Qué te parece
Fortún de sacristán?
Elvira — Explícame. . .
Fortún — Voy á explicar.
El dueño de este traje,
Que aunque creyente,
Es hombre que le gusta
El aguardiente,
Alegremente,
Alegremente,
Se bebió una botella
Cristianamente
Y cuando las campas
Pim! pam! pim! pam!
Sonaban arriba
Como un huracán
Pim! pam! pim! pam!
El buen hombre perdido,
Bebido,
Casi dormido,
Me decía con labio embrutecido:
" ¡Fortún! ¡Fortún!
" ¡Yo soy escudero
" ¡Y tu sacristán! "
Pim! pam! pim! pam!
Y así ha sucedido,
Pues el duerme como un escudero,
Y yo estoy aquí como un sacristán,
Pim! pam! pim! pam!
Elvira Pero yo temo . . .
Fortún No temas nada.
Te ayudaré!
Elvira — Temo. ¡Ay de mí!
lortún Vete ya al coro,
En mi confía,
Yo allí estaré.
Elvira Confío en tí. \(váse Elvira íz-
\ quiérela)
36
ESCENA III
Fortún y Coro; luego el Marqués y hombres del pueblo
derecha
Coro Señor. . .
Señor. . .
Señor sacristán,
¿A qué horas empieza? . . .
Fortún Ya os avisarán.
Coro ¡Qué hermosa está la iglesia
¡Qué hermoso está el altar!
¡Qué hermoso está el profeso!
¡Qué hermoso todo está!
Fortún (¡Mas bello será el susto (ap.)
Que pronto os vais á dar.)
Coro Y es rico,
Y es noble,
Y es bello,
Y galán,
Y diz
Que muy pronto,
Milagros hará.
Fortún Yo creo lo mismo
Coro ¡Ay! quien los verá!
Vamos á la iglesia
Que ya va á empezar
Vamos,
Vamos,
Vamos,
Que ya va á empezar.
- 37
ESCENA IV
Ifortún y d Marqués
Marqués-
Coro -
Fortún -
Coro
Marqués
Fortún -
Marqués-
Fortún-
Marqués-
Fortún-
Coro-
Mirques-
Coro -
Marqués
Coro^
-¡Dejad pasar!
-Este es el tío.
-(El Marqués. ¡Vade retro!)
-¡Qué aire y qué brío!
;El sacristán sois vos?
(ap.)
Si señor.
¿Y esta gente?
(finjiendo ¡a vos)
la función.
-Devotos
Que acuden
-Está bien.
¡Que se alejen!
-(i No habéis oido?
-¡Si tal! ¡Si tal!
¡Que nos dejéis os pido! (bruscamente)
¡Vamos! (El tal Marqués,
Tiene un carácter
Angelical!)
¡Que Dios os guarde
Noble señor!
-Está bien, ¡idos!
¡Quedad con Dios! (uánse derecha)
ESCENA V
Marques ¡j Fortún
Marqués — Si viene una devota
A preguntar por mí
Fortún — Le digo que os espere.
Marqués — No tal. Que estoy allí . .
Que por ella abandono,
( s enalando háeia
el interior de la
iglesia)
38-
El servicio de Dios,
Y que entro á su servicio.
Fortún — ¿Y cómo os llamáis vos?
Marques — ¡Quiróz!
¡Quiróz!
¡El Marqués de Quiróz!
Fortún — ¡Pues no le dais
Pequeño chasco á Dios!
Marques — Decidle que no pene,
Que no sufra por mí,
Que Dios está en el cielo
Y Quiróz está aquí.
Y que mi brazo,
Y corazón,
Y mi fortuna,
Y mi blasón,
Es todo suyo,
Sin exclusión.
Fortún — Pero Marqués,
¡Por compasipn!
Ved que no es esa
Mi profesión.
¡Hacer á damas
Declaración!. . .
Marques— Vuestros escrúpulos
Muy justos son
Para acallarlos
Ved {una bolsa)
Fortún-~(\ün bolsón!)
Para limosnas
A su intención.)
Pero no habéis dicho
Como es la beldad
Marques— ¿No os la he retratado?
Fortún — No.
Marques —Pues escuchad.
" ¿Vistes en la iglesia
" A la Inmaculada. . .
— 39 —
Fortíai — " De ángeles y flores
" Y cirios rodeada? "
Marques — ¿Cómo sabéis?
Fortún — Es un cai.fcar
Que aprendí de chicuelo
En mi lugar.
Marques -Pues mi adorada
Como reza el cantar
De tu lugar
" No le envidia nada
" Nada
" Nada
u A la I' imaculada
Fortún— a Nada
" Nada
" A la Inmaculada. "
Marques— Y muerta está por mí,
Y siguiendo mis pasos
Ha de venir aquí.
Le dices que la espero
La espero en mi palacio
Concluida la función
(Y todo terminado
Queda sin dilación
Mi sobrino en el templo
Orando ante el Señor
Y yo feliz y rico
En brazos del amor.)
For tan -(Que chasco soberano (ap.)
Se lleva el gran señor
Si cree heredar al otro
Nombre, fortuna, amor.)
Marques— ¿Quedamos entena Moa?
Fortún — Sin duda, mas inñel
Suele ser mi memoria
Marques — ¿Entonces? . .
Fortún — Un papel,
Dadme aquí . . . vuestro nombre;
Marques — ¿Mi nombre? .
— 40 —
Fortún — Sí, por Dios!
Para ella será prenda . . .
Marques Pues allá va: ¡Quiróz! (firmando)
Fortún — (Cayó.)
Marques— ¡Sed muy prudente!
Fortún — No dudéis
Marques— Bien.
¡Adiós!
Fortún — ¡Adiós!
MUTACIÓN
El coro de la Catedral de Sevilla, visto desde el
fondo hacia la balaustrada que da á la nave.
Al foro izquierda, gran puerta que comunica con
la escalera. Sigue hacia la iglesia la balaustrada y
tras ella se percibe la bóveda gótica de la gran nave
central, ojivas, vidrieras pintadas, etc.
A la izquierda, silleria del coro, solio arzobispal en
la primera caja.
Al centro de la balaustrada el gran fasistál con
misales abiertos. A su pié grupo de libros é instru-
mentos de música.
Se oye á intervalos el Te-Deum que se canta en
el fondo de la nave principal.
Se ven cruzar apresurados algunos sacerdotes de
sobre-pellíz.
Entran por la puerta riel foro los seises.
Cero interno — \Te deum laudamus! (hombres)
; Te dominnm confitemur!
¡Te 03ternnm Patrem
¡Omni térra veneratuml
Incesabile voce proclamant
Sanctusl Sanctus! Sanctus!
Coro de los seises — Los votos con que el alma
— 41 —
Se liga al cielo,
Vuelan con alas de ángel
Hasta el Eterno.
Nube sagrada,
Místico incienso,
Ha besado el sagrario,
Llenado el temp^,
Y por la abierta ojiva,
En grupo estrecho
Con cánticos y aromas,
Toma su vuelo,
¡Sanctus! ¡Sanctus! ¡Sanctus! uV del
[tan pío)
Los seis es —¡Sanctus! ¡Sanctus! ¡Sanctus!
Canta desde la tierra nuestro anhelo
Coro interno— !Sanctus! ¡Sanctus! ¡Sanctus! (dentro)
Los seises -¡Sanctus! ¡Sanctus! ¡Sanctusl
Nos responden los ángeles del cielo.
Elvira — Me he lanzado en esta empresa
Sin vacilar,
Con mi corazón por guia,
Guia y antorcha
Que al fin que busco
Me llevará.
Pero confieso,
Que al encontrarme
Bajo estas bóvedas,
Frente á ese altar,
Siento una angustia
Grande, mortal!
Coro — -[Sanctusl ¡Sanctusl ¡Sanctusl (dentro)
Diego — ¡Gloria in excelsisl (dentro)
Elvira — ¡Dios do piedad!
Su voz.
Diego— ¡Hossana! (dentro)
Coro - Empieza ya
La ceremonia
Vamos allá.
Elvira — ¡Piedad! (pémepar la puerta
' {de la eec(ilera)
- 42 —
Preludio religioso, primero muy lejano, luego acer-
cándose poco á poco. Cánticos de una procesión que
semeja venir del fondo de la nave, y luego subir al
coro por la gran escalera.
Coro — Sanctus! banctus! Sánelas! (dentro)
¡Hossana qui viene in nomine Deo!
¡O! ovia in excélsis Deo!
¡Gloria! ¡Gloria!
Aparece la procesión por la puerta del foro que se
supone dá á la gran escalera.
Viene presidida por Fortún en traje de sacristán,
cod su varal de plata. Luego la cruz alta y ciriales;
en seguida Diego con traje talar acompañado del Mar-
qués de Quiróz, el cual traerá sobre sus hombros el
manto del hábito de Santiago. A sus costados vienen
dos diáconos con dalmáticas. Luego el palio llevado
por cuatro ó seis caballeros lujosamente vestidos. De-
bajo del palio, viene el Arzobispo con capa pluvial y
rodeado de sacerdotes revestidos con ricos ornamentos;
clérigos con sobrepelliz llevando en las manos cirios
encendidos, comunidades, caballeros, guerreros con par-
tesanas, monaguillos con incensarios.
Los seises, entre los cuales viene Elvira, cantando
delante del palio.
La procesión en este orden dá lentamente la vuel-
ta al escenario, hasta llegar el Arzobispo frente al
solio. Una vez allí se pliega el palio, se abren las
ñlas de la procesión hacia ambos lados, los guerreros
al fondo, los seises al pié del trono, el prelado sube
las gradas y se sienta en el gran sillón arzobispal.
D. Diego, el Marqués y los dos diáconos quedan
solos en el centro del proscenio hacia la batería.
El Marqués se adelanta hacia el trono del Arzo-
bispo, hinca la rodilla y Je besa la mano.
Los diáconos se retiran hacia el fondo.
Los seises hacen calle.
En ese momento Elvira se aproxima á Diego que
habrá quedado solo.
43
Diego— Ah! {reconociéndola)
Elvira — (No pronuncies tus votos) (bajo)
Diego — (No es posible (bajo)
Déjame por piedad!
Elvira — (Ah! no, no puedo!)
Diego — (No me tientes por Dios; déjame, vete!)
Elvira— (Vén.)
Diego — (Déjame.)
Elvira — (¡Yo te amo!)
Diego — (¡Sacrilegio!)
Elvira — (Obedece la voz que te lo manda.
Tu santa madre te habla desde el cielo.)
(Mentha contra astucia no es delito!)
Diego— (¡Mi madre!)
Elvira— (Sí.)
Arzobispo — ¿Qué pasa?
Diego— Que un momento (alto)
Quisiera meditar. . ,
Elvira— (Ante la Virgen) (ap. á Diego)
Marqués- ¡Cómo!
Arzobispo — Decid
Coro — ¿Qué dice?
Elvira— (Presto, presto) (aj). á Diego)
Diego — A los pies de María
La santa madre
Del Salvador,
Quisiera prosternarme
Y humildemente
Pedir perdón
Coro — ¡Perdón! ¡Perdón!
¡Su conciencia cristiana,
Algún recuerdo
Mundano hirió!
Marqués — (Con esta salida (ap )
No contaba yo.)
Arzobispo— Es justo el pedido.
Ekira y Fortún— (¡Triunfamos!) Cap.)
Marqués — (¡Traición!)
(Aquí hay algo oculto.)
— 44 —
Árzo hispo — ¡ An d ad !
Marqués— Mas. . . Señor. . .
Arzvbispo- Reclama su alma
Mística oración.
Marqués- ¡El Señor lo llama!
¡Lo reclama Dios!
Fortún -(No perdamos tiempo, (á Elvira)
¡Venid!)
. Elvira — {¡Qué emoción!) (ap.)
Fortún— (¡Venial) (ap.)
JElví}'a~ — (Vi)Y) ^ (vánsc Elvira y Fortún por
* " ( la puerta de la escotera.)
Marqués —(¡Infierno!) (ap. )
Coro —¡Oremos!
-p. , , . i (xe retira l enlamen'
¡x erClOll! j te la procesión can-
[ tando)
Misere mei Deus
Secundum magna misericordian tuam.
¡Misericordia!
¡Misericordia!
¡Perdón!
Marqués —(¡Infierno! ¡Traición!)
Coro — ¡Perdón! vánsei)
MUTACIÓN
Capilla de la Inmaculada. Altar lujosísimo con
hornacina practicable hacia la izquierda y en plano
diagonal con respecto al espectador. Al fondo una
gran reja que divide la nave. A través de la verja
se vé el templo en penumbra, con sus altares, esta-
tuas, etc.
La hornacina del altar está cubierta con un trans-
parente ó cortina.
45
Preludio religioso, luego vagamente, por momentos
lejano, por momentos mas próximo, el coro que repre-
senta el espíritu místico ele la oración.
ESCENA VI
Coro, luego D. Diego y Elvira
Coro — Oremos, oremos,
Fugaces
Volemos,
Por las naves sonoras del templo;
Las naves que llenan
Los místicos cantos,
Los ayes del pecho,
Las plegarias mezcladas con llanto,
Las nubes de incienso.
¡Oremos!
¡Oremos!
Fugaces
Volemos
En torno á los santos,
Que graves, serenos,
Ven pasar la oración en legiones,
En medio á la noche,
Con sus ojos que ven i o infinito
Entre las tinieblas
¡Abiertos!
¡Abiertos!
¡Oremos!
¡Oremos!
¡Volemos!
¡Volemos!
{Entra Diego abriendo la verja del fondo).
Diego— ¡Al fin el templo augusto!
¡Misterio y magestad!
— 46 —
¡Mi espíritu se expande
En esta soledad!
Ofrenda de un amor profundo y santo,
A la santa mujer que tanto amé,
Cuanto forma en la vida luz y encanto,
A los pies del Señor depositó.
Y él en su dulce y paternal cariño,
Con su mano me dio la bendición,
Y mostrándome el mundo dijo: ¡"Niño,
Anda y cumple allá abajo tu misión!"
El sacrificio del amor primero
A mi alma imponía con dolor,
Cuando viene un acento plañidero,
Que me dice tristísimo y severo:
Ora!
Ora!
A los pies de la Virgen ruega, implora,
¡Llora!
¡Llora!
¡Ella es mujer!
¡Ella es amor!
Coro — Oremos, oremos ((lejano, luego más
(próximo)
Volemos, volemos, etc.
Diego — Parece que rezando
Pasara á mi alredor
De espíritus sutiles
Enjambre volador.
Es la oración (bis)
Que se alza dentro el pecho
Con santa devoción
Coro — Oremos, oremos, etc. {dentro)
Diego — Oremos, sí
A los pies de la Virgen
Doblaré la cerviz.
El coro se funde en un murmullo.
Diego se arrodilla ante las gradas del altar, el velo
de la hornacina empieza á alzarse lentamente al com-
pás de una música dulcísima.
— 47 —
Aparece en el altar Elvira en traje de Inmaculada
y afectando la actitud clásica de esta imagen.
Diego— ¡Oh Virgen divina!
¡Oh Virgen piadosa!
Mi voz temblorosa,
A tí se levanta,
¡Oh Virgen santa!
El alma turbada
¡Señora del cielo!
Te pide un consuelo,
Para pena tanta!
¡Oh Virgen santa!
Que se abran tus labios;
De tu rostro bello
Yo vea un destello,
Entre sombra tanta!
¡Oh Virgen santa! . . .
¡Mas santo Dios! ¡Qué veo!
¿Es ilusión?
Los ojos, el rostro y cabellos,
Los su3>"os son! . . .
No puede ser!
¡Visión!
¡Tentación!
¡De Satanás
Las artes son!
¡A mí señor! (bis)
¡Virgen!
¡Virgen sagrada!
¡De mí piedad!
¡Dadme favor!
¡Terror!
o .,.. , ((cae con el rostro
¡bantlSimO terror! hobre las gradas
Elvira — ¡Diego! ¡Diego! ¡Hijo mió! { (desde la llor '
¿De qué tienes recelo?
¡Me llamaste y bajé por tí del cielo¡
Mírame bien, ¿No vés como sonrio?
Diego
- 48 —
Ah!
Hasta su voz! . . .
No me atrevo á mirarla!
Terror! ¡Terror!
Elvira — No tuerzas hijo mió
Tu inclinación;
El cielo está de fiesta
Cuando en la tierra
Se realizan los sueños
De una pasión.
Diego — ¡Ah! ¡Santo Dios!
Su voz llega hasta lo hondo
¡Del corazón!
Elvira— ¡Ama! Que el amor puro
Que el alma siente,
Es de los cielos mismos,
Estrella desprendida:
Luz refulgente!
Sea amar tu d&licia;
Sea tu anhelo,
Que no hay voto mas santo,
Ni oración mas hermosa
Que llegue al cielo!
¡Ama!
¡Ama!
Diego —¡Me siento morir!
¡La Virgen habló!
¡Apenas respire! . . .
¡Terror! ¡Terror!
¡Ah! Es verdad
¡No sueño!
¡No deliro! . . .
Me mira,
La miro! . . .
¡Inexplicable realidad!
¡Milagro!
¡Milagro!
¡Venid acá! . . . {(Elvira desaparece
• (.y cae la cortina)
49
La Virgen está viva!
Mirad! ¡Mirad!
Coro— ¡Milagro! (dentro)
¡Milagro! {cae la cortina del nicho
Vamos alia!
La Virgen está viva!
¿Dónde estará? (sale el coro)
¡Ha desaparecido!
¡Allí no está!
Diego — Estaba hace un momento
¿Dónde estará?
Coro— ¡Milagro!
¡Milagro!
ESCENA VII
Todos los personajes que han figurado anteriormente ,
menos Elvira y Fortún que entran luego, así como
el Conde (padre de Elvira), los familiares del Santo
Oficio, el Marqués, etc.
Diego — Yo estaba allí, (explicándoles dios que llegan)
En oración,
Rogándola
Con gran fervor,
Y de repente
Oigo su voz,
Que me llamaba . . .
Todos — ¡Terror! ¡Terror!
Diego— Llamo, ¡doy voces!
Se oye mi voz,
Acudis todos,
Os cuento yo,
Lo que ha pasado
Y. . . ¡Santo Dios!
¡No está la Virgen!
Todos — ¡Terror! ¡Terror!
Sacerdotes— ¡Milagro!
¡Milagro!
— 50 —
Marqués — ¿Qué pensáis, señor? (al Arzobispo)
Arzobispo— ¡Dios es poderoso!
Misterios de Dios!
Marqués — (Yo temo otra cosa) (ap.)
Diego — ¡Me hiela el pavor!
Cubierto estaba el nicho
¡Desapareció!
Coro — ¿Pero qué es eso?
Que estraño rumor. . .
El conde de Alvomonte,
Y los familiares
1 -_ 1 T . . . , ( (entran por el fondo el
De la InqUISIClOn. J conde y los familiares
( con hombres de armas)
Conde — A vuestros pies . . , (al Arzobispo)
Arzobispo — ¡Alzad!
¿Qué es lo que pasa?
Conde— ¡Mi hija! ¡Mi hija!
¡Desierta está mi casa!
Diego — (¡Elvira ¡Santo Dios!)
Conde— Sobre su lecho
Estaba este papel
Diego — (Siento en el pecho (ap.)
Una ansiedad cruel)
Arzobispo — (Lo suponía) (al Conde)
Coro — (¿Qué podrá ser?)
Conde — (¿Cómo? ¿Sabéis?)
Arzobispo — Don Diego, leed
Conde— ¡Cómo! ;Se atreve? ¡ (<¡ on ira reparan-
lo (do en Diego)
Señor, sabed (al Arzobispo)
Que este es el vil . . .
Diego — ¡Conde!
Arzobispo — ¡Tened!
Marqués— ¿Qué embrollo es este?
Coro — ¿Qué podrá ser?
Conde — Este es el seductor
Coro — ¡Horror! ¡Horror!
El que sus votos iba á pronunciar!
Engañando al Señor!
¡Horror! ¡Horror!
— 51 -
¡Y ha pretendido á todos engañar
Invocando á la Virgen del altar!
¡Horror! ¡Horror!
Familiares - Este es iíu caso de Inquisición
De esto debe entender el Tribunal
Diego — ¡Piedad Señor!
¡Señor piedad!
Familiares — ¡Prendedlo!
Arzobispo- Un momento:
En este lugar . . .
La Virgen lo ampara!
Elvira— ¡Y yo!
Todos— ¡Elvira!
Conde — ¡Mi hija!
Coro — ¡Qué irá aquí á pasar!
^ ((« *w padre, al Arzo-
hlVira — Padre, Señor. . . hispo; invocando luego
[á Dios)
¡Dios piadoso!
¡Oye el ruego
Fervoroso
De una mujer!
Un sentimiento
Amoroso
Grande, inmenso
Poderoso
Logró este milagro hacer.
Yo amo á Diego
Desde niño,
Con purísimo
Cariño,
Sin doblez.
El me ama,
Yo lo siento,
Y ese noble
Sentimiento,
Tu lo ves.
Rogamos á la Virgen :
Nos ha oido,
Y la madre de Diego,
52
De ultratumba
Nos bendice también.
Coro — La Virgen los ha oido.
Y la piadosa madre
Los bendice también!
Elvira — Esas letras son de ella,
¡Leed!
¡Leed!
Diego — ¡De mi madre! (las besa)
Dejad que las bese,
Que las bese otra vez.
¡La emoción me ahoga . . .
Mis ojos no ven!
Marqués —Veamos. . . (interp.)
Fortun — (Un momento.) (lo detiene)
(Después este otro
Podremos leer.) Upor d papel que
J ( firmó el Marquen)
Marqués - (¡Condenación!)
Fortún — (Prudencia) ,
Diego — Vjs señor, (al Arzobispo)
Leed.
Coro— Leed!
Arzobispo — " Si al pronunciar tus votos (leyendo)
" Te amara Elvira,
" Tu corazón consulta,
" Y si aun suspira
„ Por sus encantos,
" Bendigo tus amores
" Porque son santos. "
Diego— ¡Ah madre! ¡Oh madre mia!
Elvira — Gracias santa señora, (á la Virgen)
¡Santa María!
Marqués — ¿Pero y sus votos?
¡Esto es atroz!
Arzobispo— Dios lo ha dispuesto
¡Lo manda Dios!
Todos— Dios lo ha dispuesto
¡Lo manda Dios!
— 53 —
Arzobispo— Tomad á vuestra hija (al Conde)
Protecta es del cielo
De esposas el velo
Ceñid á su sien.
Sus castos amores
Dichoso consagro,
El santo milagro
Cumpliendo con fe.
Conde — Venid hija mia,
Don Diego venid,
A los pies de la Virgen
Las manos unid.
Elvira-
Diego —
Los dos—
Todos -
¡Padre!
(Señor!
¡Oh dicha inmensa!
¡Al fin triunfó el amor!
¡Oh dicha! ¡Oh dicha!
¡Al fin triunfó el amor!
Marqués —(Adiós mis sueños, (ap.)
¡La juventud triunfó!)
¡Triunfó el amor!)
Coro interno — Oremos, oremos, etc. (dentro)
(Luego campanas, muy suaví número, cada vez mas
fuerte, hasta llegar á un gran crescendo)
Coro — ¿No oís murmullos lejanos
De oración, que se aproximan
Mas y mas, y las campanas
Con qué alegría repican?
¡Ved! Los cirios del altar
Por sí solos se iluminan
Y la Virgen que sonríe . . .
¡Doblad! doblad la rodilla!
Coro interno — Oremos! Oremos, etc. (dentro)
(Vuelve el piano, el crescendo, y el fortísimo de or-
questa, órgano y campanas)
— 54 —
Coro— ¡Milagro! ¡Milagro!
¡Piedad y justicia!
¡Amor! ¡Amor!
Diego y Elvira— ¡Amor! ¡Amor!
Las bóvedas del templo
Vibran tu nombre al par de la oración
De astro en astro recorre el firma-
[mentó,
Llega tremante hasta los pies de Dios!
¡Amor! ¡Amor!
Coro— ¡Amor! ¡Amor! etc. (todos)
(Telón)
FIN